lunes, 10 de noviembre de 2008

ANDANDO SIN CESAR

La emocion que esta mas presente en nosotros es la alegria. Pudimos disfrutar de Khajuraho y sus templos y observar como en otras culturas diferentes a las nuestras la sexualidad en lugar de alejar a las personas de los dioses y el cielo, mas bien hacen todo lo contrario. Que diferencia con predicadores como el Sr. Ratzinguer i sus capitostes, siempre tan divinos y fundamentalistas, sin haber aprendido todavia que existe una diferencia fundamental entre ciudadano y feligres, y que mientras ciudadanos comos todos, feligreses son solo unos cuantos y es una opcion individual. Haber si los estados aprenden y establecen la condicion laica de una vez.

Acabamos de llegar a Gorakpur en autobus. Viajar con los medios de transporte propios de las personas de aqui esta resultando toda una experiencia. Nuestra subida al autobus a generado mucha expectacion, no son muchos los extranjeros que viajan con estos medios. Los turistas generalmente tienen sus propios medios de transporte y no se suelen mezclar con la poblacion de aqui. Lo mismo sucede cuando viajamos en segunda clase sleeper, una especie de tren granadino, con el cual es facil moverse por toda la India a modicos precios. A modo de ejemplo seria como viajar de granada a barcelona por 5 euros. Eso si, hay que tener tiempo, paciencia y capacidad para adaptarse a esta modalidad de vida.
Volvemos por tercera y ultima vez a Varanasi, ahora procedentes de Kushinagar, donde hemos visitado una serie de templos budistas, y hasta nos ha invitado un monje budista thailandes a visitar su templo y a mantener una conversacion de aproximadamente una hora. Interesante. El joven monje era psicologo y se ha emocionado sabiendo que yo tambien lo era, aunque yo no practique la meditacion, pero se ha interesado por mi formacion y forma de trabajar. Ha sido muy amable y generoso con nosotros.
El viaje es un continuo de encuentros y sepaciones que uno va teniendo a lo largo del camino. Mucha gente europea, sobre todo espanola, algunos americano de usa, y mucho coreano, japones y chino que soy incapaz de distinguirlos.

Hemos tendio la fortuna de vivir festivales unicos como el Dala Chhath, que tuvimos la fortuna de coincidir con el en nuestra segunda llegada a Varanasi. Nuestro amigo Jaggu nos recibio en el aeropuerto y nos acompanyo a la habitacion que habiamos reservado junto al Ganges. Era una fiesta de colores, luces, sonidos, los cohetes no dejaron de sonar hasta el fin de la fiesta con la nueva salida del sol. Las mujeres con sus mejores saris realizaban ofrendas al rio Ganga, los rituales de banyos se sucedian unos detras de otros, a la vez que las incineraciones no cesaban durante todo el dia, realizandose cientos de ellas. En el paseo que dimos al atardecer con la barca de Jaggu pudimos observar procesiones de velas corriendo por el rio ganges, cientos de velas, impresionante, asombroso.

Ya casi contamos las noches que nos quedan por pasar en la India, lo mucho vivido, lo saboreado, la excitacion presente en una experiencia tras otra, y sobre todo lo que este viaje deja en cada uno de nosotros y que no es posible contar. Que corto y pronto sucede todo.
De vuelta a Varanasi, manyana caminaremos camino de Bodhgaya i ya de ahi a Calcuta de nuevo para volver a casa.

Salut
Josep Lluis Furio

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